Y más en este momento de su vida en el que todas las miradas están pendientes de ella y esta situación le genera un cierto estrés. Por ello se ha marchado estos días al Marbella Club-Golf Resort & Spa para descansar intentando desconectar de una realidad plagada de paparazzi. Sin embargo, Paula Echevarría no lo ha conseguido pues en el interior de las instalaciones de este edificio descubrió a un fotógrafo tomando instantáneas mientras disfrutaba de los servicios del lugar. La actriz, lejos de amilanarse, se acercó para reclamar su derecho a la intimidad avisando, muy enfadada, de que demandaría si esas imágenes –de un recinto privado-, veían la luz. Porque la paciencia de la aún mujer de Bustamante también tiene un límite.